En este Blog tengo la intención de reflejar fotograficamente las sensaciones que experimento cuando piso la Sierra con mi familia o con mis amigos.

viernes, 10 de diciembre de 2010

El dia Despues

La verdad que después de estar varios días con la Capota de las nubes puesta sobre Granada y Provincia, y cuando el pasado día 3 de Diciembre amaneció como amaneció, se empezó a oír el grito de guerra.... Mientras haiga tarjeta y batería.......

Pues lo dicho, era espectacular la vista mañanera.



El Veleta, Caballo y Tajos Altos, se desperezan por la mañana.





En estos menesteres estaba cuando suena el móvil y el amigo Tajos Altos pregunta....
Tienes algo de hacer esta tarde?....
Presintiendo una salida rápida a nuestro medio, digo que no y quedamos para la tarde.
Cuando lo recojo, perfecta mente pertrechado... Tarjeta vacía, baterías llenas.... pues, vuelve a sorprenderme y me dice; Tira p'al Llano.
Una vez en el Llano y después de caminar durante unos minutos, recordando los tiempos cuando subíamos con la Peña Deportiva Granada a jugar o acompañar a los que jugaban al fútbol, y a través de la cual nos conocimos hace muchos, muchos años.
Y la verdad, completamos el día porque desde el Cerro del Sol, volvimos a nuestros tiempos jóvenes, cuando en vez de tarjetas y baterías, gastábamos película blanco y negro:

En lo  mas alto; Mulhacen, Machos y Veleta

En primer plano el Dornajo

Veleta
Bueno, vamos a lo que vamos, hasta que el sol empezó a caer esto fue lo que vimos:
Miguelejos y Calar de Güejar

Picón de Jeres,Tajos Negros, Loma de los Cuartos y Loma del Calvario
Vacares

Mulhacen

Veleta

Caballo
Como dije en anteriores Repor, hay que mirar para todo los lados y verlo todo.


Sierra Arana

Cerro de la Cruz

Tozal del Cartujo







 Tan ensimismados estábamos que cuando queremos acordar , empieza a caer la tarde y con ello viene la sinfonía final de colores.

Empieza con unos suaves virajes a tonos rosáceos, como lo demuestran estas fotos del Mulhacen y del Veleta

Pronto ese manto rosa vira hacia tonos rojizos y envuelve todo el blanco que vemos.

Volvemos la mirada hacia el origen de esta sinfonía, que también se merece un poquito de nuestra atención.

Realmente maravilloso



El atardecer nos premia con la apoteosis final


Curiosa vista de los Peñones de San Francisco

El Caballo se despide
 Y también la tarde

hasta la próxima